A veces achacamos enfermedades que pueden ser un verdadero problema y mermar de forma extraordinaria la calidad de vida de nuestros mayores a achaques o “cosas” propias de la edad
En este contexto, es fundamental poder y saber descartar los llamados GRANDES SÍNDROMES GERIÁTRICOS que son, principalmente los siguientes:
— Inmovilidad.
— Inestabilidad y caídas.
— Incontinencia urinaria y fecal.
— Demencia y Síndrome Confusional Agudo.
— Infecciones.
— Desnutrición.
— Alteraciones en vista y oído.
— Estreñimiento e Impactación fecal.
— Depresión e Insomnio.
— Iatrogenia
— Inmunodeficiencias.
— Impotencia o disfunciones sexuales..